dijous, 20 de novembre del 2008
Sócrates (vídeos y películas)
Vida y obra
La sabiduría de Sócrates no consiste en la simple acumulación de conocimientos, sino el poder afirmar,con plena conciencia, "sólo sé que no sé nada". Esto lo hace una de las figuras más extraordinarias y decisivas de toda la historia, representa la reacción contra el relativismo y subjetivismo sofísticos, siendo un singular ejemplo de unidad entre teoría y conducta, entre pensamiento y acción. Fue a la vez capaz de llevar tal unidad al plano del conocimiento, al sostener que la virtud es conocimiento y el vicio ignorancia. El poder de su oratoria y la facultad de expresarse públicamente eran su fuerte para así poder conseguir la atención de las personas.
Breve:
extracto obra de teatro interpretada por Raul Palma, adpatacion del texto de platon. Mas informacion en;
WWW.TEATROSIGLOXXI.CL
Extenso y detallado*** (aunque demasiado cadencioso):
El proceso de Sócrates
Socrate (1970) (Roberto Rossellini) - 114 min
dimarts, 18 de novembre del 2008
La hegemonía de Atenas (s. V a. de C.) y las guerras del Peloponeso (431 a 404 a. C.)
Liga de Delos
Atenas había terminado asumiendo la dirección de las Guerras Médicas y desde que Arístides organizó la Confederación de Delos, quedó convertida en ciudad jefe de la misma. Hizo trasladar el tesoro de la Liga de Delos a Atenas que pareció por algunos años la capital de un estado unificado y no tuvo inconveniente en obligar a someterse por la fuerza a los estados de la confederación que Intentaban abandonarla.
Esplendor de Atenas: el siglo de Pericles.
Atenas era la primera ciudad de Grecia, gracias a una superioridad que ninguna discutía, pero que muchas envidiaban. Espléndidamente reedificada, después del saqueo e incendio de que había sido objeto por las tropas de Jerjes, y con sus magníficos monumentos, llegó a ser la ciudad más rica y bella de todo el mundo griego.
Pericles, orador y hombre de estado, jefe del partido popular, fue durante veinte años el ídolo de Atenas y el arbitro de sus destinos.
- Estableció nuevas colonias en Magna Grecia, Tracia y Calcídica.
- El puerto de El Píreo fue transformado
- y las naves atenienses mantenían un intenso comercio en todo el mar Mediterráneo.
El siglo en que vivió el gran hombre de estado ha sido llamado Siglo de Pericles, y durante él, llegaron en Atenas a su punto culminante, la organización de la democracia, la cultura y las artes.
Guerras del Peloponeso. (431 a 404 a. C.)
El antagonismo entre espartanos y atenienses era cada día mayor, y Esparta, aliada de Corinto y Tebas, y en posesión de un magnífico ejército, deseaba ardientemente la guerra que le permitiera acabar con el poderío ateniense y recobrar la hegemonía que había perdido desde las Guerras Médicas.
La ocasión la brindó una guerra local entre Corara y Corinto, que fueron respectivamente apoyadas por Atenas y Esparta, comenzando las Guerras del Peloponeso, que duraron 27 años (431 a 404) y fueron llamadas así porque casi todas las ciudades del Peloponeso, capitaneadas por Esparta, tomaron parte en ellas. Fue una lucha entre pueblos dorios y jonios, y apenas quedaron estados neutrales. Esparta no tuvo inconveniente en aceptar el interesado apoyo de los persas, que odiaban a los atenienses.
Guerra de los Diez años (431 a 421 a.C.)
En la primera fase, llamada, por su duración, Guerra de los Diez años, los espartanos
invadieron el Ática, y en Atenas, una epidemia de peste causó muchas víctimas, entre ellas Pericles. Fue substituido por Cleón, que en una de las derrotas perdió la vida.
Su sucesor Nicias ajustó la paz de su nombre (Paz de Nicias), que sólo fue una tregua de escasa duración.
Guerra de Sicilia (415 a 413 a. de C.)
La segunda fase fue la llamada Guerra de Sicilia, ya que tuvo lugar en esta isla, donde los atenienses, dirigidos por Alcibíades, nieto de Pericles, pusieron sitio a Siracusa, que no pudo ser conquistada. El ejército ateniense que se había adentrado en la isla fue aniquilado y los supervivientes vendidos como esclavos.
Guerra de Decelia (413 a 404 a. C.)
El desastre sufrido animó a los espartanos a ocupar la fortaleza de "Decelia (año 413) próxima a Atenas, cuando ya disponían, gracias al "oro de los persas, de una escuadra.
En esta tercera fase o Guerra de Decelia, la mayor parte de las ciudades aliadas de Atenas se rebelaron contra ella, y la escuadra ateniense quedó deshecha en Egos Potamos (405).
Atenas fue sitiada, capituló bajo durísimas condiciones y quedó sometida a Esparta (404). Aunque más tarde volvió a recobrar su libertad, nunca más recobró su antiguo poderío.
La hegemonía de Esparta (hasta 397 a. C)
Terminadas las guerras del Peloponeso, quedó Esparta ocupando el primer puesto entre las ciudades griegas, pero su hegemonía fue más dura que lo había sido la de Atenas.
Esparta se mezcló en la vida interior de las ciudades, intentando excluir a los demócratas de las funciones de gobierno, para encomendarlas al partido oligárquico.
Esta época de apogeo espartano está caracterizada por una expedición enviada a Persia para prestar apoyo a Ciro el Joven, que se había rebelado contra su hermano el rey Artajerjes. Éste obtuvo la victoria y los espartanos, dirigidos por Jenofonte, se vieron obligados a hacer la famosa Retirada de los Diez Mil (401 a. C.), perseguidos de cerca por los enemigos. El mismo Jenofonte escribió (Anábasis) la historia de estos sucesos.
Los persas contra Espartae Esparta (hasta 397 a. C)
Entonces los persas vieron al enemigo en Esparta y le declararon la guerra, fomentando al mismo tiempo contra ella las sublevaciones de las ciudades griegas descontentas de su hegemonía.
El rey espartano Agesilao pudo vencer con su aguerrido ejército a los sublevados del interior, pero su escuadra fue derrotada por la persa, que iba mandada por el ateniense Conón.
Antes de perder la supremacía, los espartanos, prefirieron pactar con los persas, tradicionales enemigos de Grecia (Paz de Antálcidas, 397 a. C.) a quienes entregaron las colonias de Asia Menor, a cambio de su protección.
La hegemonía de Tebas (371-361 a. C)
Varias ciudades griegas formaron una liga, a cuya cabeza se puso Atenas. Con su ayuda, los generales tebanos Pelópidas y Epaminondas "arrojaron a los espartanos de Tebas (371 a. C) y la hegemonía de esta ciudad substituyó a la de Esparta.
Decadencia de Grecia
Sólo diez años duró la hegemonía de Tebas y tras ella renacieron en Grecia las frecuentes y asoladoras luchas, que fueron lentamente debilitando a todas y cada una de sus ciudades, sin que ninguna de ellas hubiera llegado a ser lo suficientemente fuerte para dominar a las restantes y hacer la unificación política del país. Ésta fue impuesta, en la segunda mitad del siglo IV, por los macedonios.
diumenge, 9 de novembre del 2008
Sócrates (mp3- Pancracio Celdrán)
dimarts, 4 de novembre del 2008
Homosexualidad en la antigua Grecia
De Wikipedia, la enciclopedia libre (ligeramente modificado)
En la antigüedad clásica escritores como Heródoto,[1] Platón,[2] Jenofonte,[3] Ateneo[4] y muchos otros exploraron los aspectos del amor homosexual en la Antigua Grecia. La más extendida forma de relación sexual homosexual se daba entre hombres adultos y chicos adolescentes, conocida como pederastia. No está claro cómo se veían las relaciones entre mujeres en la sociedad, pero existen ejemplos tan antiguos como el de Safo de Lesbos[5] .Contenido |
Contexto
En la Antigua Grecia la orientación sexual no era un identificador social, como sucede en las sociedades occidentales de los últimos siglos. Para la sociedad griega lo relevante no era el sexo biólogico de quienes mantenían relaciones sexuales, sino que estas respondieran a sus deseos y se ajustaran a las normas de comportamiento comunmente aceptadas. Estas normas se basaban en el género, la edad y el estatus social[5] . Existe poco material original sobre cómo consideraban las mujeres la actividad sexual.Principalmente, hay dos puntos de vista sobre la actividad sexual masculina en la antigua sociedad griega. Algunos eruditos, como Kenneth Dover y David Halperin, afirman que existía una marcada polarización entre compañeros "activos" y "pasivos", penetrador y penetrado, y esta polarización activo/pasivo estaría asociada con roles sociales dominantes y sumisos: el rol activo se asociaría con la masculinidad, con un estatus social alto y con la edad adulta, mientras que el papel pasivo se asociaría con la feminidad, con un estatus social bajo y con la juventud[5] . Según esta visión, cualquier actividad sexual en la que un hombre penetrara a alguien socialmente inferior se consideraba normal; se consideraba «socialmente inferior» a mujeres, hombres jóvenes, extranjeros, prostitutas y esclavos. Igualmente, ser penetrado, especialmente por alguien socialmente inferior, podía ser considerado vergonzoso[5] .
Las relaciones entre hombres normalmente incluían a un hombre adulto y a uno joven: el hombre mayor tomaría el rol activo[6] .[7] Eran relaciones generalmente «cariñosas», «amorosas» y «afectivas»[8] y los vínculos que creaban fureon decisivos «en la historia griega y la guerra, la política, el arte, la literatura y la educación, resumiendo, en el milagro griego».[9]
Pederastia

Existían elaborados protocolos sociales para proteger a los jóvenes del deshonor asociado a ser penetrado. Se esperaba que el erómeno respetara y honrara al erastés, pero no que lo deseara sexualmente. Aunque ser cortejado por un hombre mayor era prácticamente una prueba de hombría para los jóvenes, un joven con deseo sexual recíproco para con su erastés debía afrontar un estigma social considerable[5] .
Los antiguos griegos, en el contexto de las ciudades-estado pederastas, fueron los primeros en describir, estudiar, sistematizar y establecer la pederastia como institución social y educacional. Era un elemento importante de la vida civil, militar, filosófica y artística.[10] Existe cierto debate entre los expertos sobre si la pederastia se daba en todas las clases sociales o si estaba mayoritariamente limitada a la aristocracia.
La moralidad de la pederastia fue exhaustivamente analizada en la Antigua Grecia, siendo considerados algunos de sus aspectos como infames y otros como lo mejor que la vida podía ofrecer. En el diálogo platónico de las Leyes, la pederastia carnal es descrita como "contraria a la naturaleza"; sin embargo, los interlocutores de este diálogo reconocen que una iniciativa por la abolición de la pederastia sería impopular en la mayoría de las ciudades-estado griegas[5] .[11]
Pederastia entre militares
Los tebanos atribuían al Batallón Sagrado el poder de Tebas durante la generación anterior a su caída ante Filipo II de Macedonia, que quedó tan impresionado ante su valor en combate que mandó construir un momumento que aún hoy se mantiene en pie en el lugar donde se enterró a los soldados. También criticó duramente las opiniones que los espartanos tenían del Batallón. Dice Plutarco en su obra Pelópidas:
- Perezcan los que hayan podido pensar que entre semejantes hombres haya podido haber nada reprensible[12] .
- El Néstor de Homero no fue muy habilidoso capitaneando un ejército cuando ordenó que los griegos formasen por tribus (...), pues debía haber unido los amantes con sus amados. Porque los hombres de la misma tribu se valoran muy poco los unos a los otros cuando el peligro acecha; pero un grupo cimentado en la amistad basada en el amor nunca será separado pues, temiendo la afrenta, los amantes por los amados, y éstos por aquellos, así perseveran en los peligros los unos por los otros.[12]
- Encontramos que la mayoría de las naciones guerreras son más adictas al amor, como los beocios, los lacedemonios y los cretenses. Y entre los más antiguos héroes ninguno fue tan amoroso como Meleagro, Aquiles, Aristómenes, Cimón o Epaminondas; el último de los cuales tuvo como concubinos a Asópico y a Cafisodoro, que fue asesinado junto a él en la Batalla de Mantinea y yace enterrado muy cercano a él.[13]
Amor entre hombres adultos
Patroclo y Aquiles [editar]
Esquilo, en su tragedia Mirmidones, dibujaba un Aquiles protector ya que había vengado la muerte de su amante aun cuando los dioses le hubieran advertido de que le costaría la propia vida. Fedro por su parte afirma que Homero enfatizó la belleza de Aquiles, lo que lo definiría a él, y no a Patroclo, como erómeno.
Parejas históricas de hombres adultos
Se conocen muchas parejas de hombres adultos en la historia, en las que ambos son adultos. Entre éstas la de Eurípides, en la setentena, con Agatón de Atenas, de unos cuarenta. El legendario amor entre Alejandro Magno y su amigo de la infancia, Hefestión, se considera según teorías acerca de las relaciones personales de Alejandro Magno una relación de este tipo.Amor lésbico
También han quedado documentadas relaciones eróticas pedagógicas en Esparta, junto con el nudismo atlético de mujeres. En El Banquete de Platón aparecen mujeres que:
- No se preocupan por los hombres, pero tienen contactos con mujeres.[15]
Controversia entre los expertos
Las prácticas homosexuales en estas sociedades (Atenas, Tebas, Creta, Esparta, Elis y otras) solo han sido abordadas en profundidad tanto en sus aspectos históricos como éticos desde los 1990s. Uno de los los primeros estudiosos en abordar la homosexualidad en la antigua Grecia fue John Addington Symonds que escribió la tesis Un problema en la ética griega en 1873, pero tuvo que esperar 28 años, para ser publicada en 1901.[16] También se publicó en esta época los trabajos de Erich Bethe en 1907. Edward Carpenter expandió el alcance del estudio en su trabajo de 1914 Tipos intermedios entre el folclore primitivo. El texto examina practicas homoeróticas de todo tipo, no solo pederastas, en una amplia gama de culturas de todo el mundo.[17]Históricamente ha habido un ambiente de censura en este tema, la mayoría de los estudios sobre la Antigua Grecia omitían deliberadamente las referencias a la homosexualidad. En la novela de 1910 Maurice se hace referencia a este "código de silencio" cuando un profesor de Cambridge anotaba "Omitir: referencia al innombrable vicio de los griegos". En los años 1940 H. Michell afirmó "Este aspecto de la moral griega es extraordinario, y siendo ecuánimes, no es provechoso husmear demasiado profundamente". Tras una largo periodo marcado por la censura en temas de homosexualidad los estudiosos empezaron a abordar el tema.[18]
En Alemania los estudios fueron continuados por el experto en el mundo clásico Paul Brand que escribió, bajo el seudonimo Hans Licht, Vida sexual en la antigua Grecia publicado en 1930. Hasta 1978 no se publicó un libro en ingles que tratara en exclusiva el tema histórico de la homosexualidad, Homosexualidad griega de K. J. Dover. La obra de Dover provocó una serie de debates que continúan actualmente y provocó una fuerte polémica en los griegos modernos por mostrar esta imagen de la Grecia antigua.
Estos expertos han mostrado que las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo eran practicadas de manera abierta, en gran medida con permiso oficial, en muchas áreas de la vida desde el siglo VII a. C. hasta la era de la antigua Roma.
Aunque esta perspectiva es fruto del consenso de los expertos de América del Norte y Europa del Norte, también hay opiniones que afirman que las relaciones homosexuales, especialmente la pederastia, eran comunes solamente entre la aristocracia y no entre la gente común (δῆμος , dêmos). Un erudito que afirma esto último es Bruce Thornton, quien argumenta que los insultos dirigidos a los homosexuales pasivos en las comedias de Aristófanes muestran el rechazo de las gentes sencillas hacia la homosexualidad masculina[19] . Otros puntos de vista, como el de la experta Victoria Wohl, enfatizan que en Atenas el deseo entre personas del mismo sexo era parte de la «ideología sexual de la democracia», compartida por la élite y el dêmos, de lo que son ejemplo los tiranicidas, Aristogitón y Harmodio.[20] Incluso quienes defienden que la pederastia estaba limitada a las clases más altas conceden generalmente que era «parte de la estructura social de la ciudad»[19] (πολις, polis).
Otro debate es si en la relación pederastia griega había reciprocidad o no. Unos afirman que era el reflejo de una relación de superioridad y que el erómeno simplemente se sometía.[21] Mientras que la mayoría sostiene que había un relación de amor mutuo, expresión del deseo de ambas partes en la que no se forzaba al joven en absoluto, como se representa en los debates de Platón.[22] [23] [24]
Fuera del mundo académico, tanto los opositores al movimiento de liberación sexual como los nacionalistas griegos se han aferrado, por razones políticas, a la tesis de que la homosexualidad estaba limitada a las élites.
El tema ha causado controversia en la Grecia actual. En 2002, una conferencia sobre Alejandro Magno fue asaltada porque un estudio sobre su homosexualidad iba a ser presentado. Cuando la película Alejandro Magno, que muestra a un Alejandro con escarceos románticos tanto con hombres como con mujeres, fue estrenada en 2004, veinticinco abogados griegos amenazaron con demandar a los productores de la película,[25] pero cedieron al ver un avance de la película.[26] La película fue un fracaso en Grecia, donde se exhibió durante tan sólo cuatro días.
Véase también
- Pederastia en la Antigua Grecia
- Prostitución masculina en la Antigua Grecia
- Homosexualidad en la antigua Roma
Referencias
- ↑ Heródoto, Historias, 1.135.
- ↑ Platón, Fedro, 227a.
- ↑ Jenofonte. Memorables, 2.6.28; El Banquete , 8.
- ↑ Ateneo, Banquete de los eruditos,13:601-606.
- ↑ a b c d e f g (en inglés) Entrada homosexual en el Oxford Classical Dictionary, ISBN 0-19-860641-9.
- ↑ (en inglés) T.K. Hubbard, How to Do the History of Homosexuality en Bryn Mawr Classical Review del 22-09-2003.
- ↑ (en inglés) D.H. Mader, The Greek Mirror: The Uranians and their Use of Greece, en Same-Sex desire and Love in Greco-Roman Antiquity and in the Classical Tradition of the West, páginas 411-2. The Haworth Press, 2005. ISBN 978-1-56023-604-7.
- ↑ (en inglés) Keith DeVries en Queer Representations: Reading Lives, Reading Cultures. New York University Press, 1997. ISBN 978-0-8147-1883-4.
- ↑ (en inglés) W.A. Percy III, Reconsiderations about Greek Homosexualities en Same-Sex Desire and Love in Greco-Roman Antiquity and in the Classical Tradition of the West, páginas 47-8. The Haworth Press, 2005. ISBN 978-1-56023-604-7.
- ↑ (en inglés) Golden M., Slavery and homosexuality in Athens, en Phoenix 1984 XXXVIII:308-324.
- ↑ Platón, Leyes 636, 838-841.
- ↑ a b Plutarco, Pelópidas 18. Es posible encontrar online el texto traducido al castellano [1].
- ↑ Plutarco, Obras morales y de costumbres (Moralia). Volumen IV: Del amor, en "Flaviano y Autóbolo, hijos de Plutarco, 17". Es posible encontrar online el texto traducido al inglés [2].
- ↑ Andrew Calimach, Lovers' Legends: The Gay Greek Myths
- ↑ Platón, El Banquete (El Simposio), 191e. Es posible encontrar online el texto traducido al inglés [3].
- ↑ A Problem in Greek Ethics
- ↑ Intermediate Types among Primitive Folk
- ↑ Richard Norton, Critical Censorship of Gay Literature (en inglés).
- ↑ a b (en inglés) Bruce Thornton, Eros: The Myth of Ancient Greek Sexuality páginas 195-6. Westview Press, 1997. ISBN 0-8133-3226-5.
- ↑ (en inglés) Victoria Wohl, Love Among the Ruins: the Erotics of Democracy in Classical Athens, páginas 6-7. Princeton University Press, 2002. ISBN 0-691-09522-1.
- ↑ Eva Keuls, The Reign of the Phallus: Sexual Politics in Ancient Athens, 1985
- ↑ James Davidson, The Greeks and Greek Love, Orion, 2006
- ↑ Robert B. Koehl, "Ephoros and Ritualized Homosexuality in Bronze Age Crete;" in Queer Representations: Reading Livers, Reading Cultures; Martin Duberman, ed. New York University, 1997
- ↑ Hein van Dolen, Greek homosexuality, [4]
- ↑ Noticia en [5] y [6].
- ↑ Noticia en [7].
Otros materiales bibliográficos
- (en francés) Suzanne Lilar, Le Couple. Les Éperonniers, 1988. ISBN 2-87132-193-0.
- (en inglés) Keneth Dover, Greek Homosexuality. Vintage Books, 1978. ISBN 0-394-74224-9.
- (en inglés) David Halperin, One Hundred Years of Homosexuality: And Other Essays on Greek Love. Routledge, 1989. ISBN 0-415-90097-2.
- (en inglés) Thomas K. Hubbard, Homosexuality in Greece and Rome. University of California Press, 2003. ISBN 0-520-23430-8.
- (en inglés) Willian A. Percy III, Pederasty and Pedagogy in Archaic Greece. University of Illinois Press, 1996. ISBN 0-252-02209-2.